La resonancia Schumann y el cambio planetario

La Resonancia de la Tierra (Resonancia Schumann) está relacionada con el espectro electromagnético del planeta. En un lenguaje simplificado podríamos decir que es la “vibración” o resonancia de la Tierra como si fuera una campana que vibra. Esta resonancia ha sido de 7.8 hz. por miles de años. Desde 1980 se ha elevado gradualmente hasta 12 Hz. Esto para algunos investigadores significa que 16 horas equivalen ahora a un día de 24 horas. ¡El tiempo se está acelerando!

Y en ésta vorágine diaria parece que nuestras mentes están desacopladas, dislocadas o fuera de sincronía con la realidad en transformación. Los fenómenos climáticos y catástrofes también están involucrados en un cambio planetario. Por ejemplo, en algunas zonas en que la primavera ya debería haber llegado, parece que hay un “retroceso” espacio-temporal y que viviésemos en invierno. Tenemos la sensación que “algo” extraño ocurre en el ambiente, es como si nuestras mentes estuvieren “desencajadas” del movimiento del tiempo y de la realidad cotidiana. Esto puede causar:

-      Sensaciones eléctricas en los miembros y la columna vertebral.

-      Calambres en el sistema muscular.

-      Síntomas parecidos a la gripe.

-      Sueños intensos o insomnio.

       Agotamiento y aumento de depresión.

La razón es como si la realidad espacio-temporal, los mismos átomos y secuencia del tiempo estuviesen siendo cambiados o ajustados a un nivel diferente de vibración. Cómo necesitamos tiempo de adaptación para los cambios (y educación sobre el fenómeno),  y esto sucede con mucha rapidez, es como si nuestra mente se quedara atrás y no lograra armonizar, en vista de que también se ata al pasado y al apego a la materia (también a los paradigmas mentales erróneos sobre la vida). 

Sin embargo, ésta realidad está en cambio y modificación. Las destrucciones climáticas y geológicas nos hacen ver que la materia debe derribarse, cambiar y reconfigurarse.

Quiénes vieron la película Matrix comprenderán la analogía de que estamos en una especie de “reconfiguración de la matrix” para bien, para que la Tierra ingrese a un estado geológico y evolutivo superior, y en este proceso de parto y maduración, ocurren estas crisis y tensiones.

¿Pueden los Documentos de Urantia respaldar esta idea que ha sido comentada por algunos círculos del New Age? ¿Tendrá algún asidero alguna parte de ésta teoría? Parece que sí, ya que hay elementos verdaderos involucrados:

(457.7) 41:2.8 La supervisión de la energía de poder en los mundos habitados evolucionarios es responsabilidad de los Controladores Físicos Decanos, pero estos seres no son responsables de todos los trastornos energéticos en Urantia. Existe una cantidad de motivos para dichos disturbios, algunos de los cuales están más allá del dominio y control de los custodios físicos. Urantia está ubicada en las líneas de tremendas energías, un pequeño planeta en un circuito de masas enormes, y los controladores locales a veces emplean enormes números de su orden en el esfuerzo por equilibrar estas líneas de energía. Funcionan bastante bien respecto de los circuitos físicos de Satania, pero tienen problemas en aislarse contra las poderosas corrientes de Norlatiadek.

Nuestro planeta desajustado sin duda debe provocar algunos fenómenos fascinantes y misteriosos que ocurren en nuestro mundo, algunos de índole espacio-temporal y que afectan las mentes. Parece que la Tierra vive un periodo de maduración (incluso física), y tal como las gripes,  pestes y cambios hormonales que atacan a los adolescentes previos a la edad madura, la Tierra sufre algo así. El problema es que las masas humanas no están listas para éstos ajustes mentales. Hay profecías de videntes bíblicos que declaran:

“En aquellos días los hombres buscarán la muerte y no la hallarán” – Apocalipsis 9:6

“Se desmayarán de terror los hombres, temerosos por lo que va a sucederle al mundo, porque los cuerpos celestes serán sacudidos” – Lucas 21:26

“Contra su propio hermano la espada de cada uno llegará a estar” – Ezequiel 38:21

Todo lo anterior indica que la gente se trastornará y volverá loca en masa, habrán intentos de suicidios a gran escala, caos y violencia unos contra otros. Se sabe que una gran perturbación solar también podría “freír” nuestro cerebro y causar una “peladura de cables”, locura y desesperación.

¿Cómo combatirlo? La ORACIÓN es esencial ahora, porque eleva nuestras mentes y genera una especie de escudo o campo de fuerza que protege nuestras mentes (un yelmo en palabras bíblicas). Mantener buenas dosis de oración y hacer actividades altruistas por otros que nos enseñen el desapego, son vitales.

Pensemos que se nos ha revelado que la Tierra es una “sede divisional de arcángeles” y que habrán  “actividades futuras”,  y que el destino del planeta aún “no está revelado”. ¿Será transformada la Tierra a la categoría de un mundo más similar a un planeta moroncial? ¿Volverá Jesús a dar inicio a esa nueva Edad?